Para hacerse una idea de lo que es bailar al lado del mar, una imagen vale más que mil palabras.
La fiesta fué luminosa, cañera, sudorosa y divertida, se dieron muchas vueltas y revueltas y aqui podeis ver la foto de familia, aunque en realidad eramos demasiados para entrar todos dentro del marco.
Y esta es la parte divertida, todo el mundo preparado haciendo evoluciones con una estampa de palmeras y el mar de fondo, llenando el paseo de música y buen humor.
Si no otra cosa, espero que os resulte atractiva, ser buenas que para hacer trastadas ya me pinto yo solita.
Felices sueños.